miércoles, 23 de abril de 2014

El Despertar de los Barbos

Barbo Estremeño
Como cada año, días antes de la llegada de la primavera, los primeros barbos de la temporada se empiezan a prodigar por las orillas, es el momento de empezar a tentarlos.



Vista de una de las zonas del embalse
A pesar de que las orillas no presentan la actividad que mostraran semanas después, a base de caminar y buscar las zonas de mas querencia, seremos capaces de localizar a estos colosos.

Peleando un barbo.   Fotografía: Luciano Rodríguez Peña
Para mi en estos momentos, la pesca de estos peces a ninfa se hace casi imprescindible si queremos garantizar las capturas y obtener buenos resultados, mas adelante la pesca en superficie sera la principal protagonista.

Fotografía: Luciano Rodríguez Peña
Lances largos, presentaciones delicadas y precisas de nuestras ninfas serán fundamentales si no queremos asustar estos peces, que al principio suelen estar bastante asustadizos y aletargados, algo que ira cambiando a medida que las temperaturas empiecen a subir, lo cual hará que la actividad de estos peces se vuelva frenética.

Uno de los mas gordos de estas jornadas
Para mi el principio de temporada es el mejor momento para capturar los mayores ejemplares y pescar de una forma mas selectiva antes de que barbos de todos los tamaños poblen las orillas masivamente.


Las jornadas que pase detrás de estos ciprinidos a mosca, fueron de lo mas variada, desde días de sol sin viento que obligaban a pescar lo mas fino y discreto posible.


A días de lluvia, viento y cielos encapotados que hacían muy complicado la visualización de estos, basando la pesca en la localización de sus aletas para poder ponerles las ninfas delante la boca.

Día de lluvia y aire en el embalse
En estas condiciones, quizás de las mas complicadas que uno se puede encontrar, cada captura es todo un reto y nos provocara una gran satisfacción


Aunque también estas condiciones favorecen que los ejemplares mas grandes patrullen las orillas y que estos se sientan mas confiados facilitando nuestro acercamiento a ellos para poder presentarles nuestras mocas artificiales.


En estos momentos casi tenemos que intuir las picadas, ya que seremos incapaces de ver lo que esta pasando bajo la superficie,  algo que le da un encanto especial a este tipo de pesca.


Estas jornadas de pesca fueron a primeros de marzo, Pero por circunstancias personales hasta ahora no le podido publicar esta entrada.


Ahora me consta que los barbos ya están en plena actividad, y que en algunos lugares han comenzado ya la subida a los ríos y arroyos, donde algunos buenos amigos y compañeros de pesca ya están disfrutando de ellos a tope.

Rubén Guzmán, un buen amigo con un precioso barbo capturado en una de los muchas Gargantas de Extremadura.

Texto: J. Peña
Fotografias: Luciano Rogriguez Peña, J. Peña, E. Ramos.


3 comentarios:

  1. Preciosos peces y fantasticas fotografias. Felicidades por esas jornadas. un saludo.

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  2. Bonitas fotos Javier. Qué bien te lo pasas con mis paisanos, jejeje.

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  3. Gracias compañeros y que no falten estos bigotudos que tantas alegrías y peleones nos dan cada temporada, a partir de ahora.... Non Stop!!
    Saludos y buena pesca ;)

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